miércoles, 29 de abril de 2015

REGRESION “Prisioneros”

(Santo Grial Records)
Los barceloneses Regresión siguen avanzado con paso firme en su cada vez más consolidada carrera. Desde que en 2004 grabaran su primer trabajo homónimo el quinteto catalán no parado de crecer ofreciendo con cada entrega sucesiva muestras de mayor y mejor nivel tanto compositivo como interpretativo, siempre con el heavy rock como base y con la reivindicación y la crítica social muy presente en sus textos. Ya con su segundo disco “Revolución” (2008) empezaron a tener mayor presencia en medios y festivales, pero fue con “Santa Decadencia” en 2010 cuando entraron de lleno en la escena nacional completando un más que notable trabajo.
Ahora, y tras la publicación en formato digital del EP “Estrella Del Rock” hace un par de años, refrendan todas esas buenas sensaciones con este “Prisioneros”, un disco contundente y directo, pero lleno de matices, en el que una vez más se muestran tremendamente críticos con la situación socio-política actual, pero siempre con un gran tratamiento musical, los temas son bastante más que meros mítines, como por desgracia les pasa a otras bandas que sacrifican la música en pos de un mensaje con el que, por otra parte, se podrá estar más o menos de acuerdo.
Empiezan a ponernos en situación con una breve instrumental que da título al trabajo creando una ambientación suburbial y algo angustiosa que enlaza con la potente “5 De Noviembre” en la que las guitarras de Pablo González y Toni Sánchez se doblan con fuerza y acierto imponiéndose sobre unos mínimos teclados, dejando que la voz de Pedro Guijarro se exprese con poderío, resultando luego desafiante en la trabajada “Corre! Escóndete!” donde los redobles de José Ignacio Uría y el bajo de David Pérez sustentan un ritmo cortado en el que su estribillo golpea con rabia.
Continúan en clave más hard con la sarcástica “Dr. Muerte” en la que sus guitarras afiladas son rebajadas por unos curiosos toques de teclados acompañando otro potente estribillo y otro solo de guitarra doblado de nivel, pasando a un sonido más crudo en la desafiante “Cautivo” con algún golpe de megáfono incluido, para sorprender luego en “El Knaya” pura ironía a ritmo rocaknrolero con unos arreglos de teclas de lo más curiosos.
Tras este momento medio vacilón, llegamos a dos de los temas que más me han gustado del disco, “Lévame Contigo” contagiosa y dinámica con unas buenas guitarras de alto octanaje y con estribillo medio festivo que bien puede recordar a los madrileños Beethoven R. o a los vigueses The Mirage. Y “No Nos Van A Parar”, heavy rock potente y claro, con unas guitarras frescas y unas muy buenas melodías vocales perfectas para rodear su mensaje de autoafirmación y lucha rockera. Tampoco está nada mal, aunque con un sonido más sombrío “Voces” con unos coros armónicos que resaltan sobre una instrumentación menos resultona de nuevo con algunos acertados aportes de teclados.
El final lo ponen la melancólica “Déjame Soñar” puro heavy rock clásico nacional desarrollado a medio tiempo destilando un añejo encanto ochentero, y la venenosa “Estrella del Rock” que rescatan de su anterior EP suponiendo un magnífico cierre con su rollo macarra y rocanrolero lleno de tópicos (sexo, drogas y R&R) pero tratado con una gracia y actitud que hacen que no resulte tan previsible.
Disco más que interesante, bien producido por la propia banda, con un sonido claro y rotundo, pero sobre todo con un puñado de buenos temas que podrían convertirse en himnos a poco que tuvieran la repercusión necesaria, bien por Regresión.
Mariano Palomo

JOLLY JOKER “Here Come… The Jokers!!”

(The Fish Factory)
En un estilo como el Hard Rock, y más concretamente dentro del sleazy, cuando se tiene como referentes a bandas tan grandes como Mötley Crüe, Skid Row, Poison o Hardcore Superstar, por nombrar algunas, uno puede caer en el error de acabar siendo un simple imitador y por parecer una simple caricatura, ya que parece que hay que nacer en Estados Unidos o en Suecia para resultar creíble. Pero afortunadamente de vez en cuando surgen bandas dentro de nuestras fronteras capaces de mirar a los ojos sin problema a cualquier formación puntera del género. Es el caso de los valencianos Jolly Joker, que ya empezaron a llamar nuestra atención hace un par de años con su primer trabajo “Sex, Booze & Tattos”, y que ahora con “Here Come… The Jokers!!” acaban de conquistarnos arrastrándonos sin remisión hasta su terreno lleno de fiesta y sobre todo de mucho rock & roll.
Todo lo que ya estaba presente en su entrega anterior lo refuerzan con un sonido realmente logrado, sonando lo sucios que tienen que sonar por momentos, pero siempre claros y con un muy buen nivel musical y con una actitud arrolladora que empiezan a desplegar desde el primer segundo del CD. Con las primeras notas de “Rockin’ In Stereo” nos transportan hasta cualquier garito lleno de humo y alcohol sobre un ritmo festivo y descarado en el que las guitarras curdas y cortadas de Jannick y Eddie dan réplica la voz algo nasal de Lazzy Lane perfecta para el tema que engancha con su adictivo estribillo, siendo de lo más efectiva y sencilla.
En esta onda puramente sleazy nos dejan otros buenos temas como “Hey You” arrogante en su estribillo insinuando y golpeando con su deje macarra aliñado por unas guitarras incendiarias, la más melódica “Showgirls” divertida y pegadiza con su ritmillo vacilón recordándome bastante a los Crüe de mediados de los ochenta, para desmelenarse aun más con “Full Of Beans” pura diversión con un ligero toque surf guitarrero, como pasa con “King Size” divertida invitación al desparrame de menos de tres minutos. Pero también saben ponerse tiernos como demuestran en “Way Back Home” potente balada sleazy de manual con toques acústicos  que bien podrían haber firmado Bret Michaels y compañía.
El influjo más clásicamente hard rockero también está presente, basta con escuchar cortes como la contagiosa “No Way Out” con un tratamiento rítmico muy AC/DC saliéndose Jannick y Eddie a las guitarras, como sucede en la más seria “Perfect Life” menos directa pero igualmente solvente, y en menor medida en la desafiante “No Place To Go” dotada de gran cuerpo y pegada que amortiguan sus riffs sucios y sus voces displicentes.
Sube la dureza y la distorsión en “Sidewalks” donde destaca su trabajo de voces dentro de un sonido más denso con el bajo de Luke muy marcado con un breve solo dentro del sinuoso ritmo que propone junto al batería Kickstarts, escuchándola se me vinieron a la mente los L.A. Guns más atormentados. En esa misma onda algo oscura, pero con más ritmo, nos dejan “Ride On” con un estribillo arrogante que sobresale sobre una cadencia vocal arrastrada y unas guitarras más romas, y la más pesada “Damned” adornada por un muy buen solo de guitarra.
Cuarenta minutos de entretenidísimo hard sleazy que reafirman a Jolly Joker como una de las apuestas más sólidas de nuestro rock, ahora sólo me falta aprobar la asignatura de disfrutar de ellos en directo, algo que tengo pendiente hace tiempo y que espero poder solucionar lo antes posible.
Mariano Palomo

lunes, 27 de abril de 2015

THUNDERHEART “Night Of The Warriors”

(Killer Metal Records)
El heavy metal underground madrileño sigue activo y ofreciendo nuevas e interesantes aventuras. Una de las que más ha llamado la atención últimamente ha sido en la que se embarcaron hace ya unos meses el guitarrista Willy Gascón (ex Steel Horse), el batería Ricardo Lázaro (Calibre Zero) y el cantante Javier Pastor (ex Wild). Los tres se unieron para dar forma a Thunderheart, una formación enraizada en el heavy metal clásico más ortodoxo como ellos mismos se han encargado de manifestar en alguna ocasión y que, desde luego una vez escuchado este primer disco, no engañaban a nadie. Lo suyo es puro y duro heavy ochentero influenciado por los sonidos que surgieron desde los suburbios británicos durante la NWOBH pero también por los de Hannover o Hamburgo de las bandas alemanas que marcaron el camino para la avalancha que vino después, o incluso de alguno de los grupos de power americano. Todo ello, seguramente, fraguado en largas noches de headbanging en los bajos de Argüelles.
Teniéndolo tan claro había pocas dudas de lo que íbamos a encontrar, imagen, portada, títulos, todo nos lleva al mismo punto, ahora tocaba comprobar cómo iban a ser capaces de plasmarlo en forma de canciones, y la verdad es que no sorprenden, en este caso para bien. El sonido es bastante claro, dentro de una producción mejorable pero bastante decente para lo que suele verse por ahí dentro del género (no por sonar peor se es más auténtico, otra cosa es los medios con los que se pueda contar).
Guitarras afiladas pero melódicas, estribillos y coreos pegadizos, ritmos muy marcados, y una voz como la de Javier Pastor que, si bien en un principio me resultó algo difícil de asimilar, ha terminado por parecerme bastante adecuada para la propuesta del grupo. Está claro que no estamos ante la típica demo de unos colegas que se juntan para grabar unos cuantos temas sin apenas ensayar, aquí se intuye bastante trabajo y años de rodaje de los músicos en sus otras bandas, sobre todo por la figura de Willy Gascón que me parece de lo más remarcable, sin menospreciar para nada la labor de Ricardo Lázaro a los tambores.
El disco comienza con la instrumental “New Horizons” minuto y medio a modo de melódica intro con aires guerreros para llevarnos a “Show Them Our Fire” que mantiene un poco de épica sobre un ritmo cabalgante doblando guitarras y voces quedando bastante bien. Sube un punto el nivel con “Night Of The Warriors” con un estribillo coreado y bélico que tiene pinta de funcionar muy bien en vivo, básico, sencillo y efectivo, continuando en modo hímnico con “Thunderheart” con unas rítmicas marcadísimas y unos golpes de voz que hacen que nos acordemos de Accept sí o sí.
Se recrudece el sonido con “Concrete Jungle”, más veloz y rasgada, llena de intención pero algo intermitente, y sobre todo con la más sucia y seca “Killing My Fears” sobrevolada por el influjo de Lemmy y compañía creando un corte con ritmo y rollo. Más pesadas y oscuras resultan “Rules Of A Lie” con un deje tenebroso a lo Sabbath, que se aclara algo en “Bulletproof” que tarda en entrar por su cadencia pero acaba saliendo airosa.
Recuperan la velocidad en la briosa “I’ll Always Be There For You”  igualmente cruda pero clara en su estribillo y guitarras con un buen solo de Willy, para acabar de rematar la faena con la directa “Rise Or Fall” que se nos queda en la cabeza una vez más por su estribillo clarísimo y por sus rítmicas trabajadas, siendo de las que más redondas creo que les ha quedado.
Buen disco que en sus treinta y cinco minutos duración repasa la esencia del heavy metal clásico trayéndolo de nuevo a la palestra con encanto y con una más que correcta ejecución, aunque me da la impresión que seguramente será más disfrutable en directo.
Mariano Palomo

ROMEO’S DAUGHTER “Spin”

(RD Records)

El de Romeo’s Daughter es uno de esos casos de banda de A.O.R. que sacó dos buenísimos discos entre finales de los ochenta y principios de los noventa llamados a lograr cotas mucho mayores de reconocimiento, pero que, dadas las circunstancias tanto propias como ajenas que rodearon a la escena melódica en aquellos oscuros años, se quedaron como un grupo de culto en la memoria de unos cuantos fans. Al igual que otros muchos, volvieron, tardaron lo suyo, siendo en 2012 cuando publicaron su tercera entrega “Rapture” que, aun siendo un buen disco, no llegaba a la altura de sus predecesores y tampoco tuvo mayor repercusión.
Ahora insisten con “Spin” subiendo un poco el nivel, con unas composiciones más variadas, en algún caso algo sombrías para lo que nos tenían acostumbrados, caso del medio tiempo “Love Will Come To Those That Way” donde algún que otro arreglo artificial no desmerece la maravillosa voz de Leigh Matty, sin duda su mayor baza que vuelven a explotar con acierto de nuevo. Me resulta complicado encontrar actualmente una vocalista que transmita más sensualidad, con una elegancia enorme, acariciando en cada una de las notas pero subiendo el tono cuando es preciso.
Basta con empezar a escuchar “Touch” el tema que da apertura al disco, sugerente a más no poder, suave, insinuante, con una melodía de guitarra de Craig Joiner marcada pero sin acelerar, resultando más original en “Already Gone” a la que aporta unos curiosos adornos arabescos, y mucho más envolvente en el precioso medio tiempo “Enemy” intensa y seductora pieza que acaba por convertirse en una de las destacadas, junto a “Tonight” en la misma onda romántica y algo bucólica, o a la agradable electro acústica “All Because Of You” que va creciendo en intensidad sobre su sólida base rematando con otro buen solo de guitarra.
Siguen por la misma senda animándose con el ritmo de “Perfect Plan” en la que los detalles acústicos tienen ciertos aires country pero siempre dentro de un sonido A.O.R. reforzado por una mayor presencia de teclados pero siempre con la guitarra clara y efectiva, como lo es la resultona final “Tall Buildings” rozando el pop rock, al igual que la menor “Radio” que me resulta más monótona, pareciéndome la más floja junto a la excesivamente suave “Didn’t See You Coming” agradable y con intención pero falta de solidez.
Siempre es un placer volver a escuchar la voz de Leigh Matty, y muy mal tendrían que haberlo hecho ella y sus compañeros para no dejarnos un puñado de buenos momentos en este disco, como así ha sido, pero me temo que los mejores trabajos de Romeo’s Dauhgter ya fueron publicados hace mucho tiempo. Ojalá me lleven la contraria en un próximo lanzamiento y vuelvan a convencerme tanto en estudio como lo hicieron recientemente en directo.
Mariano Palomo

KISKE / SOMERVILLE “City Of Heroes”

(Frontiers Records)

Cinco años después de sorprendernos con un interesante trabajo, el dúo formado por Michael Kiske y Amanda Somerville, vuelve a ofrecernos una más que notable colección de composiciones en las que las manos de Magnus Karlsson y Mat Sinner se dejan notar claramente. Si bien tiene algo más de protagonismo la voz de la cantante americana afincada en Europa, el germano también aporta su única e inconfundible voz para crear momentos realmente remarcables, todo ello sobre una trabajada y brillante instrumentación donde la labor de Karlsson a las guitarras y teclados resalta sobremanera, sin olvidarnos de la solidez del mencionado Sinner al bajo y de la soberbia pegada de la percusionista Veronika Lukesova.
Todo esto empezamos a comprobarlo desde el corte inicial que da título al disco, un tema de gran ritmo, clara melodía y compacta instrumentación que en clave heavy melódica nos engancha dejando cierto aroma a Avantasia por su punto épico. Tras unas alternancias vocales marcadas, continua el contraste en la envolvente de ritmo tibio “Walk On Water” con unas guitarras cristalinas que lucen sobre unos teclados que la dotan de cierta teatralidad, como sucede en “Salvation” con mayor carga sinfónica y cierto misterio rodeando a su potente base rítmica.
Pomposidad y energía en “Rising Up” tremendamente pegadiza con su estribillo arriba rompiendo dentro un ritmo cabalgante que seguramente hará las delicias de los más power metaleros, con Amanda claramente erigida en protagonista de la historia, al igual que en la magnífica “Lights Out” más melódica pero igualmente efectiva con unos buenísimos aportes marca de la casa de Kiske, o en la más floreada “Open Your Eyes” en la que su estribillo coreado marca prácticamente su desarrollo acabando por ser de las más resultonas.
Más preponderancia de las guitarras en la dinámica “Last Goodbye” con unas rítmicas que inevitablemente recuerdan a los mejores tiempos de Helloween pero con esas alternancias vocales que le dan un toque tan especial, y con espectacular trabajo a cargo de Karlsson, que vuelve a salirse en la evocadora “Run With A Dream”, menos inmediata pero con un gran entramado sonoro, como sucede en la equilibrada “Breaking Neptune” en cuya composición ha colaborado Sander Gommans, compañero de Somerville en After Forever, completando otro intenso corte donde arreglos orquestales y voces encajan con acierto.
En una onda más tranquila nos dejan “Oceans Of Tears” donde el delicado dramatismo de las voces y la sombría intensidad de sus arreglos cran una ambientación melancólica rota por un espectacular solo de guitarra, tornándose más romántica en “After The Night Is Over” un delicioso medio tiempo en el que Kiske exhibe sus mejores armas melódicas junto a unos bonitos rasgueos acústicos. Para el cierre vuelve a ceder los primeros planos a Amanda que irrumpe enorme en la grandilocuente “Right Now”, sensual y poderosa dentro de unos cambios de ritmo bien matizados.
Buen cierre para esta notable obra llena de clase y talento, donde no solo los protagonistas principales brillan, teniendo mucho que ver los que no aparecen en la cabecera de la portada. Por la cantidad y calidad de colaboraciones que lleva ya a sus espaldas parece que el señor Karlsson lleva camino de convertirse, junto al propio Mat Sinner, Dennis Ward o Erik Martensson, en uno de los músicos más solicitados del hard & heavy europeo, si no lo es ya.
Mariano Palomo

jueves, 23 de abril de 2015

FM “Heroes and Villains”

(Frontiers Records)

Creo que no descubro nada si digo que la clase y el talento no lo venden la cuarta planta del Corte Inglés, se puede trabajar mucho la técnica, la teoría, cosa que ayuda mucho a mejorar, pero si no tienes esos dones es complicado llegar a ser un grande entre los grandes. Para muestra el grupo que nos ocupa, para mí como ya he dicho más de una vez, el más grande surgido en las Islas Británicas, por no decir en toda Europa, dentro del rock melódico. Y es que con este “Heroes and Villains” FM vuelven a reivindicarse como tales, tras unos trabajos anteriores como “Rockville” o “Metropolis” que estando bastante bien no me acaban de enamorar, ahora con este nuevo disco lo consiguen de nuevo. De hecho, posiblemente, sea el disco suyo que más me guste desde los inmensos “Indiscreet” y “Tough It Out”, y eso son palabras mayores.
Han vuelto a ser capaces de parir una colección de composiciones llenas de calidad, donde los recuerdos a aquellos primeros tiempos puramente A.O.R. quedan reflejados claramente, alternando con sonidos posteriores más rockeros, pero siempre con una elegancia y encanto enormes. Con la voz de Steve Overland como baza principal en un momento de forma y de madurez difícilmente superable, siempre bien apoyado por sus viejos amigos Merv Goldsworthy al bajo y Pet Jupp a la batería, y con los ya no tan nuevos Jem Davis a los teclados y Jim Kirpatrick a la guitarra, todos ellos también colaborando en los coros.
Comienzan enganchando bien con la sugerente “Digging Up The Dirt” embaucando discretamente sin avasallar, cuando te quieres dar cuenta estás cantando su estribillo, mientras por debajo suenan teclas, guitarras y coros que inevitablemente te atrapan y que, como hemos podido comprobar un par de veces, suenan más potentes en directo. El encanto primigenio del que hablaba antes se acrecienta aún más en “You’re The Best Thing About Me” pura melodía con unos coros muy Romeo’s Daughter, algo tendrá que ver pasar tanto tiempo juntos, creando una preciosa atmósfera llena de elegancia y preciosismo en sus arreglos.
Algo similar nos encontramos en “Call On Me” absolutamente deliciosa y pegadiza, puro FM con un enorme estribillo y con unas melodías vocales y de guitarra inconfundibles, una de mis favoritas del disco, junto a “Life Is A Highway” también contagiosa, algo más rockerilla pero con una inmensa melodía vocal, y a la divertida “Shape I’m In” que invita a la fiesta con su ritmo vivo y desenfadado pero sin descuidar la calidad con un muy buen solo de guitarra. Tampoco se queda atrás en esta línea “Somedays I Only Wanna Rock n Roll” vibrante en sus guitarras y percusiones, igualmente optimista con el remate final de un aporte de saxo que le da mucho rollo.
Los guiños setenteros también están presentes en cortes como “Fire And Rain” llena de feeling con unas armonías vocales dobladas muy de la etapa “Aphrodisiac” con un magnífico Kirpatrick en las guitarras, entrando en terrenos cercanos al blues con “Cold Hearted” sobre todo por su cadencia y por los teclados orgánicos de Davis, para rozar el soul en los coros y en algunos arreglos de guitarra de “I Want You”.
Se completa el CD con “Big Brother” de cadencia rítmica marcada, aligerada por sus melodías de voz, siendo la que más tarda en entrar aunque acaba por hacerlo a base de escuchas, y con las baladas “Incredible” realmente sentida con Overland dándolo todo junto a una sólida instrumentación, al igual que en la preciosa acústica “Walking With Angels” que cierra el trabajo con la emoción en todo lo alto.
Poco más que añadir, simplemente desear que continúen así mucho tiempo y que sigan sacando trabajos tan maravillosos como este.
Mariano Palomo

PETERIK / SCHERER “Risk Everything”

(Frontiers Records)

El señor Peterik no deja de sorprendernos. En estos días nos presenta este nuevo proyecto en el que se une a un cantante prácticamente desconocido hasta ahora como es Marc Scherer, vamos, lo mismo que sucedió cuando se sacó de la manga a Toby Hitchcock para formar Pride Of Lions. Y no es esta la única coincidencia, ya que el sonido del disco, con la mayoría de los músicos repitiendo (Mike Aquino a la guitarra, Ed Breckenfeld a la batería y Klem Hayes al bajo), e incluso la voz Scherer, son bastante similares, con buen gusto, fuerza, versatilidad y poderío. No sé si tendrá la continuidad suficiente como para llegar a la altura de Pride Of Lions, pero de momento estos primeros pasos son de lo más prometedores y pueden marcar una senda de lo más interesante.
El disco arranca de manera brillante con el tema título “Risk Everything”, corte de puro A.O.R. optimista lleno de luz en sus magníficas guitarras y con mucho cuerpo tanto en su base rítmica como en las voces de Scherer, con el inconfundible sello Peterik a la hora de componer canciones vitalistas. Siguen transmitiendo energía positiva con la motivante “Chance Of a Lifetime” de instrumentación más sencilla pero tremendamente pegadiza con unos matices vocales que la hacen crecer jugando con armonías y tonalidades, para luego barnizar de un tinte más inquietante a la intensa “Cold Blooded” en la que precisión y melodía son sobresalientes.
Se relaja el sonido en el inicio tierno y pausado de “Desperate In Love” que rompe luego potente con un buen trabajo rítmico que recuerda inevitablemente a los mejores Survivor, con unas enormes armonías vocales doblándose y con un bonito solo de guitarra de Aquino. Sigue la línea preciosista “Thee Crescendo” llena de musicalidad con ese punto ingenuo tan del gusto del público americano de los ochenta, otro de esos temas que te saca una sonrisa, al igual que la contagiosa “Brand New Heart” algo más rockera pero con el mismo encanto y melodía
Nos envuelven con “The Dying Of Light”  un ritmo menor crea una ambientación evocadora para que la voz de Scherer despunte en unos tonos altos complementados por unos coros casi susurrantes recordándome un poco a Open Skyz. Se relajan aún más con el apasionado medio tiempo “Broken Home” en el que participa una segunda voz femenina dándola un toque muy especial, y sobre todo con “How Long Is A Moment” con la que creo que es prácticamente imposible que no nos venga a la cabeza “Open Arms” de Journey, caso baladón A.O.R. de manual lleno de sentimiento, y de nuevo con un excelente trabajo tanto vocal como instrumental, sobre todo de guitarra.
Para el final quedan la apasionada “Milestones” llena de clase y emotividad aunque con menos ritmo, que recuperan para cerrar definitivamente con “Your Independance Day” dinámico corte que perfectamente podría haber entrado en los discos de Pride Of Lions. Conclusión, los seguidores del A.O.R. estamos de enhorabuena con este nuevo lanzamiento, y parece que mientras que a Mr. Peterik le queden fuerzas y ganas, que por lo visto tiene para rato, tendremos todavía más satisfacciones.
Mariano Palomo

IMPELLITTERI “Venom”

(Frontiers Records)

Hacía ya tiempo que no teníamos noticias en forma de nuevo material del guitarrista Chris Impellitteri. Desde que en 2009 pusiera en circulación su anterior entrega “Wicked Maiden” no hemos sabido prácticamente nada del hacha norteamericano. Su regreso a la actividad discográfica se ve materializado en este “Venom”, un potente y atractivo trabajo en el que Impellitteri expone todas sus virtudes y clichés habituales, dejándonos un trabajo algo más rápido y duro que su predecesor, pero en la línea habitual de su carrera que se vio un tanto sobresaltada cuando publicó “Pedal To The Metal” en 2004, su obra más experimental y sorprendente con el histriónico Curtis Skeleton haciéndose cargo de las voces.
Ya en “Wicked Maiden” volvió a contar con Rob Rock, el vocalista que creo que mejor se adapta a las composiciones de Chris y con el que ha publicado sus mejores trabajos, amén del primigenio “Stand In Line” con Graham Bonnet en plenitud. Ahora Rob sigue siendo uno de los puntales de la banda cantando con su energía habitual mostrando una muy buena forma y dando réplica a las cabalgadas y exhibiciones técnicas del titular del grupo. El bajista James Pulli y el batería Jon Dette completan la nómina de músicos del disco cumpliendo con nota.
Un disco a la vieja usanza, cortito, treinta y cinco minutos de duración, diez temas y sin apenas respiro manteniendo un ritmo muy alto en todo su desarrollo. Comenzando por el tema título que arrolla con su veloz sucesión de escalas sobre una poderosísima base rítmica junto a la agresiva voz de Rob pero siempre con la melodía muy marcada incluso con algún adorno algo barroco tan del gusto de Impellitteri.
Sigue la caña con la más machacona “Empire Of Lies” con la distorsión más marcada pero también con mucha melodía en su estribillo doblado, desembocando en un endiablado solo de guitarra, prolongándose con la power metalera USA stlyle “We Own The Night” poderosa con su guerrero estribillo quedón, resultona y previsible.
El sonido se torna inquietante y teatral en “Nightmare” con una ambientación y unos cambios de tono desafiantes junto a unos afiladísimos riffs recordándome ligeramente al maestro King Diamond, siendo de las que más se quedan en el recuerdo. Algo menos atrayente me ha resultado “Face The Enemy” más pesada con la voz más agria pero expresiva y limpia, recuperando pegada y velocidad con la incisiva “Domino Theory” marcada por su claro estribillo arriba.
Con “Jehova”, además de mostrar sus creencias religiosas, recupera la vena más pomposa de nuevo con algún que otro arpegio barroco, que desaparecen en curiosa y actual “Rise” golpeando con sus desafiantes coros sobre unos pesados riffs, reapareciendo en la trabajada “Time Machine” de ritmo cabalgante casi frenético cortado por rotundos golpes de voz hasta llegar a un estribillo perfectamente reconocible.
Se cierra el disco con “Holding On” otro buen tema marca de la casa de rítmicas cortantes con virtuosos dibujos de guitarra por encima acompañando la voz más plana de Rob sobre la poderosa pegada de Dette a la batería. Buen final para un disco que creo gustará bastante a los seguidores habituales de Impellitteri.
Mariano Palomo

domingo, 19 de abril de 2015

KOVEN "En El Otro Viento"

(Autoeditado)

Estupenda sorpresa escuchar por primera vez el nuevo trabajo de los madrileños Koven, titulado "En el Otro Viento". 
Koven se mueven en registros de power metal melódico similares a Dark Moor, Avalanch o incluso Cuatro Gatos, por poner un ejemplo. Pero no son imitadores, sus canciones tienen vida y personalidad propia. Están llenas de finas melodías, juegos vocales, buenos riffs de guitarra, finos arreglos y cambios de ritmo que las enriquecen.
Koven destaca por el protagonismo de su vocalista, Ana Gárcol y por el talento compositivo y las buenas guitarras de Rubén Otero, bien secundados por el resto del grupo. 
Ana tiene una preciosa voz, capaz de sorprenderte  con varios registros y de atraparte por su musicalidad. A veces me recuerda mucho a Patricia Tapia (Nexx, Khy, Mago de Oz), o incluso a Covadonga (Cuatro Gatos) o a Ruth, la que fuera vocalista de los asturianos Darna
Para tratarse de un disco autoproducido, el mérito de Koven y "En el Otro Viento" es más que notable. Desde el dibujo onírico y cautivador de su portada, pasando por un libreto muy trabajado con todas las letras del disco y fotocomposiciones impactantes. Pero lo mejor es la cantidad de arreglos musicales y de matices sonoros que guarda el trabajo. Resulta cautivador como con tan pocos medios el resultado estético y musical del trabajo es más que brillante.
Ahora que el power metal melódico no goza de sus mejores momentos, con grandes bandas de este estilo de música pseudo dormidas como Nightwish, Within Temptation, Lacuna Coil o Evanescence entre otras (por cierto, todas con vocalista femenina), me resulta admirable la pelea de Kovem por demostrar, por salirse con la suya, por defender su música y su trabajo. Es como la lucha de unos quijotes contra molinos de viento. Por eso, tener un trabajo tan digno como "En el Otro Viento" o ser capaces de llenar la Sala Arena para presentarlo debe ser todo un orgullo y una recompensa a tanto esfuerzo.
Desgranemos las canciones que componen el disco. El disco arranca con "Los Dones", un corte que empieza a modo de intro y donde Ana comienza a desplegar su capacidad vocal. Enlazamos con "Tierra de por Medio", perfecto el equilibrio entre las voces de Ana y las guitarras de Rubén
En el otro viento, la canción que dá titulo al disco, se presenta mucho más power, con doble bombo y más poderosa; Ana es capaz de manejar varios registros vocales y las guitarras de Rubén tienen mayor protagonismo, arropando además el tema buenos arreglos de cuerda. "Alas de Papel" también es un corte más rápido y se aprecian diferentes escalas musicales, con una intensa lucha entre las voces de Ana y la musicalidad y continuos cambios de ritmo del tema.
"¿Quién lo Agradecerá?", un tema con una letra sobrecogedora y cargada de mensaje, que habla del esfuerzo de los seres queridos y de la ingratitud. Finas guitarras y buena base rítmica arropan de nuevo la preciosa voz de Ana.
"Ave Fenix" tiene matices de power ballad, pero ni su metraje ni su composición lo confirman. Pese a todo, es también apasionada e intensa.
Llegamos a "Lejos", el single y videoclip del disco. Personalmente creo que es una buena elección. Es una de las canciones más directas y pegadizas. Un tema poderoso con una intro impactante y buenos cambios de ritmo. La voz de Ana y su música contundente te engancha al primer momento.
"Tu Sombra" no es un corte tan hipnótico y ganchero como "Lejos", pero tiene personalidad propia. Cuidadas letras, buena melodía y perfecto equilibrio entre voces, guitarras y teclados.
"Bella" es una reedición de una las canciones que aparecieron en una entrega anterior de Koven, titulada "Nueva Esperanza". Ahora reeditan la canción con un mayor metraje, diferentes arreglos y nuevos matices. Es una canción preciosa, con una letra cautivadora. La intro de piano atrapa al oyente, y el dueto vocal entre Victor Hernández (Orion Child) y Ana es perfecto. El resultado es una power ballad con mayúsculas, con unos cambios de ritmo y unos matices instrumentales espectaculares.
Finalmente, la acústica "Nueva Esperanza" es un regalo y un original broche de oro para cerrar "En el Otro Viento". El sólo acústico de guitarra a cargo de Rubén y los nuevos tonos en la voz de Ana, casi a capella, son lo mejor de la canción.
Enhorabuena para Koven por muchas cosas. Primero, por ser capaces de publicar "En el Otro Viento", un gran disco por las razones antes mencionadas. Segundo, por ser valientes, por no arrugarse ante un escaparate musical tan complicado y hóstil. Y tercero, por creer en si mismos y en su música. Lo dicho, con quijotes frente a molinos de viento.
Jesús "Nono" García