lunes, 23 de noviembre de 2009

LOS ANGELES “Neverland”

(Frontiers / Mastertrax)

Cuando hace un par de años este proyecto irrumpió con fuerza con su homónimo LP de debut como uno de los mejores dentro del rock melódico de 2007, a muchos nos surgía la duda si tendría continuidad o se quedaría como una de esas muchas joyitas sin sucesor que tanto abundan dentro del género. Afortunadamente con el paso del tiempo comprobamos que el vocalista Michele Luppi y el bajista Fabrizio Grossi siguen con unas ganas y una creatividad intactas para volver a obsequiarnos con otra buena colección de temas de calidad dentro de este “Neverland”. Evidentemente parece que ya quedan lejos los tiempos de Luppi poniendo su gran voz al servicio de temas power metaleros como hacía en Vision Divine, y ahora está completamente centrado en mostrarnos su vena más melódica pero en absoluto exenta de fuerza y de pasión. Además para esta ocasión, además de seguir acompañado por Grossi, encontramos a unos cuantos colaboradores de nivel, algunos más conocidos como Tommy Denander a la guitarra y Eric Ragno a los teclados, y otros más desconocidos para nosotros como Joey Sykes y Roberto Priori también a las guitarras y Tony Morra a la batería. Dando por descontada la calidad y clase de las composiciones, hay que señalar que para mi gusto el disco tarda un poco en entrar en calor, en engancharme, dejando para el final los temas que más me han convencido, pero a base de darle escuchas el trabajo al completo tiene un gran nivel. El inicio con “Neverland” es bastante guitarrero y poderoso, pero sin salirse del A.O.R. de buenos coros y marcada percusión, bajando un punto la intensidad en “Nothing To Hide” donde sobresale la apasionada voz de Luppi y un buen estribillo muy americano ochentero, relajándose en la misma onda más con la calidez de “City Of Angels” clásica balada – medio tiempo que se hace algo larga y pelín monótona. Algo parecido le sucede a la suave y melosa “Promises” llena de feelin’ y cuerpo que me recuerda a los Heart de las Hermanas Wilson, para animarse a continuación con la interesante “Wait For You” de competente estribillo en el que se doblan las voces y de endurecidas guitarras que le dan dinamismo al corte. Y desde aquí hasta el final el disco no hace más que crecer a base de magníficos medios tiempos como “Nowhere To Hide” con la sentida y personal voz de Luppi penetrando junto a las guitarras, supongo, de Denander, “Tonight Tonight” algo más acelerado sobre un buen ritmo de teclados y una marcada base de bajo de Grossi, “Higher Love” limpio, técnico y romántico, “Living Inside” más guitarrero y con un curioso punto ambiental y apasionado por parte de Luppi que dobla su voz, al igual que en “Welcome To My Life” que se suaviza un poco pero sin perder fuerza y alegría en su ritmo, como sucede en la final “Paradise” que acaba siendo de las más destacadas del redondo por su capacidad de llegada y pasión. Gran final para un muy buen disco que va ganando en su desarrollo y en cada un de sus escuchas.
Mariano Palomo

SPIN GALLERY “Embrace”

(Frontiers / Mastertrax)

Descubrimos con su segundo trabajo este interesante y original proyecto encabezado por el vocalista Kristoffer Lagerstrom y por el polifacético instrumentista Tommy Denander que se encarga de guitarras, teclas y bajo en este disco. Ambos dan forma, junto a los invitados Glen Marks (percusión) y Marika Willstedt (violonchelo), a una docena de trabajadas y por momentos complejas composiciones en las que se mezclan sonidos altamente técnicos y sinfónicos con ramalazos rockeros y progresivos, sin olvidar el barniz más A.O.R. – West Coast de todas las obras en las que participa Denander. Con todos estos elementos logran un resultado de mucha calidad y elegancia en su sonido, pero irregular en lo que accesibilidad y energía se refiere en las composiciones. Así tenemos temas bastante competentes y asequibles como los dos en las que participan los vocalistas invitados, Robin Beck en “Just A Momentary Why”, un buen medio tiempo con toques acústicos y ritmo rockerillo donde destaca el dueto vocal de Robin con Kristoffer y su sólida melodía, y Dan Reed en “You Do The Things You Do” donde doblan las voces de forma original dentro de una estructura más técnica pero sin perder llegada y melodía recordando a Yes o al mismo John Parr. También me han parecido destacables la pop rockera – A.O.R. ”Everything Fades”, con unas voces muy suaves pero un buen ritmo guitarrero, la más animada “Eyes Wide Open” con buenos arreglos de teclas y coros, aunque algo edulcorada, la inicial “Embrace” que va cogiendo solidez con sus tintes sinfónico progresivos, o la suave y sinfónica “Stone By Stone” coronada por un agudo y brillante solo de guitarra de Denander, al igual que en la tranquila “Brilliance Of Drugs” que me recuerda a los canadienses Saga. El resto me parece menos interesante, con piezas lentas y algo sosas como la popera de escaso ritmo “Blood In My Veins”, la dulce y hueca “Indulge”, la más wimp y pegadiza “Without Love”, y la agradable aunque algo horterilla “Tic Toc”. Resumiendo, disco trabajado, técnico, suave, tan limpio como aburrido por momentos, y con retazos destacables anteriormente mencionados. Abstenerse head bangers.
Mariano Palomo

SANDSTONE “Pruging The Past”

(Limb Music)

Últimamente Irlanda no es una tierra que nos esté dando demasiadas satisfacciones musicales, pero de vez en cuando aparecen en escena formaciones tan interesantes como esta que nos ocupa. Se trata de Sandstone, un cuarteto que comenzó su recorrido musical en 2003 de la mano del guitarrista Stevie McLaughlin y del también cantante Sean McBay, a los que se unieron posteriormente el bajista David Mc Laughlin y el batería Paddy Flemming, para configurar un sólido e ilusionante proyecto que ahora ve publicado en toda Europa “Purging The Past” remezclado y remasterizado para la ocasión. Supone éste el segundo trabajo en estudio de la banda, tras “Tides Of Option” publicado únicamente en Las Islas Británicas en 2006, y nos ofrece un gran trabajo compositivo aunando sonidos progresivos, hard rockeros, y heavies, con grandes dosis de melodía, buen gusto e intensidad. Nombres como los de Fates Warning, Siam o Queensryche me vienen a la cabeza escuchando cortes del nivel de “Hiding In The Shadows” sobre todo por la voz de Sean McBay en onda Tony Mills, alta, aguda y melódica, bien apoyada por el cristalino trabajo de guitarras de Stevie y del propio Sean, que siguen luciendo la más animada “Fingerprints” de gran estribillo e instrumentación. Más contundentes se muestran en “Happy Birthday” de ritmo avasallador y compacto en onda Threshold, en la más power y guerrera “Son Of Carthage” salpicada de coros épicos y de guitarras virgueras y rasgadas, que se endurecen en la igualmente destacada “The Road To Guantanamo” más progresiva y tan siniestra como brillante en sus arreglos. Esa misma línea progresiva, pero más electrónica la encontramos en “Enigma” en la que se crea una atmósfera espacial y misteriosa, ganando en energía en otras como la inicial “Anymore Lies”, o la más rápida y contagiosa “D.O.A.” con la voz de Sean más nasal junto a unos riffs más rockeros. Las partes más densas las tenemos en la más sombría y melancólica “Division” donde las guitarras y bases duras y progresivas recuerdan a Evergrey, para caer en ritmos más lentos y suaves con la profunda y ambiental “Karma”, con la acústica “Y” llena de sentimiento redondeada con un gran solo de guitarra, al igual que en la intensa “All Operations” que cierra el trabajo casi en clave de power ballad. Muy buen disco, con un sonido brillante, y que nos descubre a un interesante combo al que los seguidores del progresivo melódico tendremos que seguirle la pista.
Mariano Palomo

PACO VENTURA “Sol Navajo”

(Avispa)

Doce años después de la publicación de “Aventura”, primer disco en solitario del guitarrista de Medina Azahara Paco Ventura, aparece ahora en escena este revival del mismo bajo el título de “Sol Navajo”, que no es otra cosa que aquel trabajo primigenio decorado y aderezado con cuatro temas nuevos y alguna mínima modificación del que nos ofrecía el guitarrista cordobés en el mismo. En cualquier caso es una buena ocasión para disfrutar del virtuosismo instrumental de Ventura, un tanto eclipsado para el gran público en su trabajo con Medina, y de volver a escuchar buenas composiciones instrumentales tal cual nos las ofrecía en “Aventura”, caso de la demostración de buen gusto que supone “Concierto Para La Paz” en la que se deja notar su indisimulada e indisimulable admiración por el sueco Malmsteen, al igual que en la más barroca llena de dinamismo “Opus Suite 82”, o en la breve y elegante “Preludio De Amanecer” en la que mezcla guitarras españolas, eléctricas y piano dándole sentimiento al corte. Siguiendo con los temas recuperados sin apenas variación en los mismos, encontramos sonidos más clásicos en la profunda y trabajada “Reflexiones De Gloria” con buenos sonidos de cuerda surgidos desde los teclados de Manuel Ibáñez, más suaves casi a ritmo de nana en “Corazón Dulce” que va ganando en solidez por la rotunda base que proponen el gran Pepe Bao al bajo y Anye Bao a la percusión, y más evocadores en el medio tiempo “Estrella De David” en la que de nuevo se mezclan acústicas y eléctricas junto a unos mínimos detalles de clavicordio y teclados. La otra mitad del disco es más novedosa e interesante para los que ya habíamos degustado “Aventura” en su momento. Las dos instrumentales nuevas, o rescatadas, “Muñeco De Nieve” y “Abani” suponen dos nuevas exhibiciones técnicas, la primera cercana a la onda barroca malmsteeniana, y la segunda más experimental y actual que recuerda a Steve Vai con su base más pesada y sus sonidos electrónicos. “Coge Mi Mano” es puro rock melódico con José Luis Juárez repitiendo al igual que en “Aventura” con su voz muy melódica y personal y con unos buenos juegos de sonido de teclados en distintos registros que sustentan su gran estribillo. Se reinventa “Sol Navajo” sustituyendo Leo Jiménez a Juárez para dar cuerpo con su profunda voz a esta evocadora composición de inspiración india americana que bien podría encajar en las banda sonora de “Bailando Con Lobos”, llena de clase y sentimiento. Dejo para el final lo que ha supuesto para mi lo más interesante de este trabajo, se trata de los dos nuevos temas en los que pone su gran voz el desaparecido en combate Rafa Martín. Tanto “Sigo Por Ti” como “Si Recuerdas” suponen un satisfactorio reencuentro con las composiciones A.O.R. a medio tiempo que tan bien domina el cantante madrileño, pero sin perder pegada con sus buenos estribillos y letras en los que luce la pasión vocal de Rafa, siendo la primera algo más rockera y la segunda más pegadiza y suave. Nos queda la duda de si estos temas nuevos han sido compuestos para la ocasión, si se ha regrabado todo el disco, o si se han aprovechado las grabaciones originales de antaño para volver a ofrecérnoslas ahora, de cualquier modo, el resultado creo que es bastante satisfactorio.
Mariano Palomo

sábado, 21 de noviembre de 2009

MOB RULES “Radical Peace”

(AFM Records / Avispa)

Una de las formaciones más rescatables de la hemorragia powermetalera de Centro Europa vuelve a la carga con un nuevo e interesante trabajo. Hablamos de los germanos Mob Rules que en estos días ponen en circulación su sexta entrega en estudio bajo el título de “Radical Peace”, y en él encontramos los elementos básicos que han caracterizado el sonido del grupo desde sus inicios hace tres lustros, calidad, técnica, pomposidad, bases power metaleras, guitarras cuidadas, arreglos orquestales y buenas composiciones. En este caso podemos dividir el disco en dos partes, una de seis temas independientes que se inicia con el power melódico de “Children Of The Flames”, acertadamente elegida para abrir fuego con sus aires clásicos y evocadores con la voz del fundador Klaus Dirks como destacada baza junto a las trabajadas guitarras de Matthias Mineur y Sven Lüke, y a los interesantes arreglos de teclados de Sascha Onnen. No se quedan atrás en su precisa y rotunda labor el batería Nikolas Fritz y el bajista Markus Brinkmann que sujetan con su buen hacer trabajadas y atractivas composiciones como la marcial y casi medieval “Trial By Fire” en la que la épica se hace presente dentro de una estructura power melódica de ritmo vivo y marcado, en la más sombría y profunda “Warchild” de intensas voces y claro y recitado estribillo un tanto eclipsadas por unos arreglos orquestales de teclas y por un extenso y profundo solo de guitarra, mejorando a continuación con “Astral Hand” elegida como primer single con un ritmo mucho más dinámico y por momentos cercano al hard rock, aunque salpicado con algún arreglo barroco. Los otros dos temas de esta media docena independiente son “Waiting For The Sun” y “The Glance Of Fame” que cierran el disco ofreciéndonos un heavy melódico, de ritmos ágiles y matizados y buenos juegos de guitarras y teclas, con la voz de Klaus más agresiva y rasgada en el primer caso, y acerándose más a registros progresivos muy melódicos con ciertos aires Queensryche suaves. Entre medias, justo antes, nos encontramos con la otra parte del disco, la extensa composición de dieciocho minutos “The Oswald Files” que continua la línea argumental de su anterior álbum “Ethnolution A.D.” dividida en seis capítulos que se abren a modo de discurso bélico en su prólogo, para continuar en clave pomposa y orquestal con “Desperate Son”, que va intensificándose en su ambientación y voces, para llegar al lento y teatral interludio (11:30 a.m.) que da paso al cuarto capítulo “Unnecessary Doubt?” que se endurece en su instrumentación aunque bastante melódica, pasando a continuación a tomar un tono más ambiental y acústico en “A Dead Man’s Face” para acabar endureciéndose y rasgándose, para terminar con un gran solo desgarrador y un elegante piano en el último capítulo “Did You Reach The Sun?”. Una elaborada y brillante composición conceptual que en absoluto aburre ni se hace pesada con sus precisos cambios de ritmo y registros. Por sí solo ya casi merecería la pena todo el disco por este tema, pero además los otros seis completan un trabajo bastante interesante de este grupo que sigue manteniendo el nivel y publicando obras competentes.
Mariano Palomo

NOSTRADAMEUS “Illusion’s Parade”

(AFM Records / Avispa)

Poco a poco, y sin hacer mucho ruido, los chicos de Nostradameus han ido perseverando y manteniéndose en el candelero metálico alemán a base de sacar correctos trabajos y de participar en numerosos festivales del viejo continente. Nunca me han parecido excesivamente brillantes en lo que a instrumentación se refiere, pero sí creo que estas carencias técnicas las suplen con energía y sudor en sus lanzamientos, algo que siempre es de agradecer. Con este “Illusion’s Parade” que ahora nos presentan no hacen más que reafirmar las impresiones anteriores, con cortes agresivos y potentes como la arrogante “Walk Of Pain” que abre el disco con buenas líneas vocales melódicas pero intensas, con la cruda y acompasada “Nothing” en la que llenan sus coros a lo Blind Guardian, o con la contundente y afilada “Armaggedon Forever” donde destaca la labor de los guitarristas Jake Freden y Lennart Specht que hacen que el sonido roce el thrash metal. Un sonido más machacón y rascón que continua haciéndose presente en la desgarrada y misteriosa “Time For Madness” en la que el vocalista Freddy Presson muestra sus registros más rasgados. Ritmos más pesados y power metaleros para “Art Of Deception” en la que sus coros arriba destacan, para dar más protagonismo a la percusión de Esko Salow y al bajo de Thomas Antonsson en la épica y marcial “The Mariner” con unas estrofas dobladas recitadas y unos misteriosos arreglos melódicos, aunque sin acabar de atraparme, al igual que la breve y lenta “Illusion’s Parade” a modo de peliculero y prescindible interludio instrumental. Me convencen en mayor medida con la más técnica y rotunda “Eclipse Of The Sun-Cult” con unos buenos arreglos de guitarra española, y sobre todo con la extensa “Broken Soul (Virgin Mary)” que en sus casi once minutos pasa de la oscuridad inicial, a unos aires teatrales y atormentados, transitando por parajes acústicos y místicos, para romper con un fragmento progresivo e intenso. En mi opinión lo más brillante y elaborado de este disco bastante justito en estos aspectos, pero que por energía y actitud al menos merece el aprobado.
Mariano Palomo

LITA FORD “Wicked Wonderland”

(Ear Music / Edel)

Casi quince largos años hemos tenido que esperar para echarnos al oído nuevo material registrado en estudio de la mano de una de las referentes dentro del hard rock ochentero femenino. Y la verdad es que visto el resultado la señora Lita Ford casi podía haberse ahorrado el esfuerzo y haber seguido perdida en su isla del Caribe junto a su familia. Una familia, en concreto su esposo Jim Gillette que creo tiene mucho que ver en estridente y poco atractivo sonido de este “Wicked Wonderland”, recordar que el amigo Gillette se dio a conocer musicalmente poniendo su voz a Nitro, la histriónica banda del guitarrista Michel Angelo. Y si encima a los temas les añadimos unos arreglos industriales, electrónicos, pesados y poco asequibles, casi lo único aceptable que nos queda de los mismos, es la voz de Lita que mantiene bastante bien el nivel de antaño, que aunque tampoco me pareció nunca la mejor cantante del mundo, ni mucho menos, sí sabía rodearse de buenos colaboradores, algo que creo que no ha conseguido en esta ocasión. Aun así se puede rescatar alguna composición algo más limpia y cercana a lo que nos tenía acostumbrados antaño, caso de la melódica y alegre “Scream 4 Me” que engancha con su estribillo, pero igualmente pesada en su ritmo y base, la hard rockera actual “Patriotic Sob” con unas líneas de guitarra muy similares al “Sister Of Pain” de Vince Neil, la más rotunda y misteriosa “Love” que adopta cierto ritmo rockero por momentos, al igual que la más industrial “Betrayal”, o la más hard rockera “Truth” que se cargan con sus arreglos dentro de un irregular desarrollo. El resto prácticamente para olvidar, mucha máquina, poca brillantez, y algún momento algo más aprovechable en forma de estribillos en los bonus tracks “Garden” y “Push”; especialmente olvidables y cargantes me resultan temas como “Sacred” plomiza a más no poder, la experimental “Indulgee” sin ton ni son, o la opaca y robótica “Inside” que no hay por donde cogerla. Junto a Lita y a Gillette completa la formación para este desafortunado trabajo el bajista Greg Hampton que también se encarga de los sintetizadores (pocas veces peor utilizados) y de la guitarra rítmica. Lo dicho, una pena, y una pequeña decepción para los que crecimos, quizá mirando más los posters, que escuchando los discos de esta rubia rockera americana.

Mariano Palomo

martes, 17 de noviembre de 2009

UNSOULED “Start Over”

(Molusco Discos)

Parece que los sonidos más contundentes tienen un nuevo referente en nuestro país con la aparición en escena del primer trabajo de los madrileños Unsouled. Si hace no demasiado tiempo bandas como Angelus Apartida, Ebony Ark, o los propios Gauntlet (con los que tienen mucho que ver) nos sorprendían con su buen hacer, estos cuatro chicos se unen al club de bandas potentes y técnicas de la mano de Molusco Discos y del gran trabajo a la producción de la gente de los estudios New Life responsables del poderoso sonido de las obras de las bandas citadas. Esto es precisamente lo primero que me llama la atención de este “Start Over”, la limpieza y potencia de su sonido, dotado de una intensidad y rotundidad ciertamente notables, pero sin dejar de lado en absoluto buenas líneas melódicas, y algunos toques progresivos que redondean una base thrasher actual en la que apoyan sus composiciones. Los cuatro miembros de la banda desarrollan su labor con eficacia y brillantez por momentos, el batería Carlos Ayuso tan contundente como preciso, bien secundado en la base rítmica por la solidez del bajista José Carlos Asensio, para dar réplica a los técnicos y afilados guitarristas Javier Fernández y José Gil, este último encargado también de poner su personal y matizada voz a cada uno de los temas del disco. Un disco que se abre de forma agresiva y técnica con “@Echo Off” con unos aires Annihilator en los riffs que se pulen en su desarrollo, dinamizándose a continuación en la poderosa y rotunda “Delivering Favours” algo machacona con su ritmo cabalgante. Un ritmo que se atempera un tanto en la más tétrica “Fire In The Wormhole” adornada por un extenso y progresivo solo de guitarra, para a continuación recordarnos a sus mentores y amigos Gauntlet en la más frenética pero igualmente técnica “Human Waste”. Se oscurece un tanto el panorama con “C. Elegans” con un desarrollo guitarrero más pesado junto a la voz de José Gil más rabiosa y directa, matizada por un cambio de ritmo lento y elegante muy progresivo. A continuación encontramos dos cortes prácticamente enlazados, la suave, lenta e intensa “She” breve y de buenos arreglos acústicos y eléctricos, que prácticamente sirve de intro a la poderosa “Coldness” que rompe rotunda con un desagarrado grito y unos magníficos riffs que acaban enganchando por su ritmo y sus buenos y directos coros a pesar de su dureza. En la recta final “Toy” y “Abscence” son dos buenos ejercicios de thrash limpio de impecable técnica instrumental, sobre todo de pegada a cargo de Carlos Ayuso, en el primer caso con un ritmo más cabalgante y desgarrado, y en el segundo con una cadencia más seca, pesada y agresiva. El cierre definitivo lo pone la instrumental, breve y suave, “Last Cry For Angels”, demostrando que también saben ser delicados cuando quieren, pero creo que esto no es lo que les va a hacer ganar más adeptos, y sí la tremenda energía y calidad que exponen en el resto del disco. Gran descubrimiento para los seguidores del thrash metal más técnico.
Mariano Palomo

BLACKWOOD CREEK “Blackwood Creek”

(Frontiers / Mastertrax)

Parece que el señor Kip Winger está más activo que nunca y ahora vuelve a sorprendernos con el lanzamiento de un nuevo proyecto compartido con su hermano Nate a la batería y con su amigo de la infancia Peter Fletcher a la guitarra y las voces. El proyecto en cuestión se llama Blackwood Creek y en este disco que aparecerá a principios de diciembre se recogen once temas de hard rock enérgico, melódico y guitarrero, pero con unos aires setenteros que le alejan un poco, no demasiado, de lo que nos tiene acostumbrados a ofrecernos Winger, sobre todo desde el “Pull”. Empezamos a corroborar estos parámetros con la inicial “Out In Outer Space”, llena de energía agresiva y rockera, aunque algo machacona, eso sí, con la voz de Kip magnífica potente y matizada. Se tranquilizan a continuación con la electroacústica de aires ligeramente sureños “Nothing But The Sun”, de buen estribillo algo Beatles, como sucede en “After Your Heart” más romántica y envolvente, o en la final “Wooden Shoe” más coral donde se alternan las voces con unos buenos arreglos de guitarras. La vena intimista sale a relucir en la acústica y lenta “Albatross” que se va atormentando con sus partes casi a capella, y en el inicio de la más americana y melódica “Your Revolution”, que se va animando e intensificando. La más apasionada “Dead Strung” de coros doblados bien podía encajar en el track list de “Pull”, como sucede con la más pesada en su cadencia “Jimmy And Georgia”, algo bluesy y áspera en las voces. Los sonidos más puramente hard rockeros melódicos los encontramos en la alegre y enganchante “Rack Of Greed” de estribillo directo y coreado, en la más intensa y profunda “Love Inspector” con la voz más ronca recordando incluso a Gene Simons y con los coros protagonistas de nuevo, y en la más vacilona y compacta “Joy Ride” de buen ritmo y mejores guitarras. Un buen disco, entretenido, bien ejecutado, y que nos muestra algún nuevo matiz en la carrera de Kip Winger, aunque sin alejarse demasiado de los que nos viene ofreciendo últimamente.
Mariano Palomo

ON THE RISE “Dream Zone”

(Frontiers / Mastertrax)

Seis años después de sorprendernos muy gratamente con su primer trabajo, la banda de Terje Eide y Bennech Lyngboe, ya sin la participación de este último, vuelve con nuevo disco debajo del brazo. En este “Dream Zone” Terje vuelve a encargarse prácticamente de todo, voces, guitarras, teclas y bajo, ayudado por Eric Engebresten a la batería, por Christian Wolf a los teclados, bajo y guitarras, y por Eric Ragno también a los teclados. Viendo la superpoblación de teclistas presentes obviamente el sonido de teclado está muy presente, pero no eclipsa el buen trabajo de guitarras que salpica las composiciones. El sonido es una continuación lógica de lo que On The Rise ofrecía en su primer disco, A.O.R. cristalino, de gran presencia vocal, elegante, pero menos sorprendente y con algo de menos impacto y pegada. Hay cortes en los que las guitarras dotan de más ritmo y alegría a los temas, caso de la inicial “Lifeline”, del tema título “Dream Zone”, de la más técnica “Alive”, o de la asequible y pegadiza “In The Line Of Fire”. Más o menos en la misma línea se mueven “Fly Away” de gran estribillo, al igual que la dinámica “Why Wait Another Day” en la que destacan sus juegos de voces y sus arreglos de teclas algo sinfónicos, tornándose más envolventes en la elegante “Tomorrow Never Dies”. Los momentos más relajados los encontramos en la acústica “Edellyn” con sus voces corales casi a capella, y en la cálida e intensa “Howling At The Moon” donde las voces sobresalen sobre una suave instrumentación y un escaso ritmo. Ritmo no les falta a las más wimp “Get Out Of Here” que ralla el pop, al igual que la ochentera “Lost Your Track” y la pegadiza “No Time To Lose” de coreado y tendido estribillo. Se completa el disco con el bonus track “Find A Way”, un buen corte de A.O.R. guitarrero y animado que se dulcifica con sus voces más cercanas al west coast. Buen cierre para un disco correcto, inferior en mi opinión a su debut discográfico, pero que creo gustará a los seguidores de los sonidos más suaves.
Mariano Palomo

jueves, 12 de noviembre de 2009

SAHARA ”Sólo Un Segundo”


Hace muchos años que desde nuestro fanzine Alianza y desde nuestros programas de radio en Radio Vallekas apostamos por nuevos grupos de rock españoles. Hemos compartido viaje y descubierto para el gran público a bandas del calibre de Nexx, Ankhara, Básico o Eden Lost, por ejemplo. Compañeros de viaje musical y amigos desde hace mucho tiempo. Bien, siguiendo esta idea voy a presentaros el nuevo y primer trabajo de una formación comprometida y apasionada: los madrileños Sahara. Su ópera prima se titula “Sólo Un Segundo”, un trabajo autoproducido por ellos mismos y cargado de buenos temas de puro rock n´roll. Se formaron allá por 2005 y cómo dicen en su página web eran 6 tipos en mitad del desierto que tenían claro qué hacer: rock (de aquí la portada del disco). Y bien que lo hacen. Cortes frescos y pegadizos, con finas letras y estribillos que llegan fácil al público. Sahara abre fuego con “Fue Una Noche”, un corte eléctrico que se inicia con buenas guitarras y navega melódico e intenso, creciendo poco a poco. Juan Pedro trabaja bien la voz, arropado por los coros en el estribillo. Una buena canción con cambios de ritmo para empezar. Seguimos con “Dame Más Amor”, una canción con doble formato en este disco. La primera se inicia guitarrera y directa, con una letra cargada de mensaje (amor correspondido) y que en directo cobra más protagonismo y mayor metraje. El siguiente corte es “Qué No, Qué No”; nos presenta una letra estupenda, denunciando el mundo artificial y los realities televisivos que nos rodean. En su inicio recuerda a Beethoven R, es pegadiza y directa, iniciándose a capella para seguir muy rockera. Las guitarras son protagonistas, enfrentándose a la voz de Juan Pedro, que canta con garra y con tonos más altos. Aplacamos los ánimos con “No Dejes Que Sea Yo”, un precioso medio tiempo que nos cuenta la historia de una separación, más o menos amistosa. El tema crece a medida que avanza, tiene mucha melodía y cambios de ritmo, lleno de matices y buenos arreglos, donde Juan Pedro ofrece lo mejor de su voz y se mueve como pez en el agua. En el ecuador del trabajo, “Celos” quizás sea la canción más ganchera del disco. Su temática es obvia. Se inicia con una intro de piano y continúa con un gran punteo de guitarra. El tema es muy pegadizo y melódico, enganchando al oyente. “Sólo Un Segundo” es una canción más personal, de tintes biográficos. Es hermosa y está bien estructurada, con buenos coros y finas guitarras. A estas alturas, conviene destacar el fantástico trabajo instrumental de todos los miembros de la banda. Carlos y José Qky Torrecilla están muy bien a las guitarras, como Juanjo a los teclados y la base rítmica, formada por Mariano al bajo y Ruby a la batería se muestran eficaces y compenetrados. Seguimos. “Sin El” es más lenta y blusie, muy armónica y tiene mayor protagonismo de teclados. Sin embargo, Tal vez es más directa y cañera. Denuncia el fanatismo de algunos. Es un corte directo y pegadizo, un buen cierre de disco, muy guitarrero. Vamos con los bonus. Una cover del clásico de Bon Jovi “Living On A Prayer” (Slipery When Wet 1986); original, acústica y muy personal. Sahara la hacen suya y les queda muy maja. Cierran con el remake de “Dame Más Amor”, esta vez con una intro más atmosférica que la primera, en formato extendido. Buen primer trabajo de Sahara, lleno de ilusión y buenos temas. Ahora tendrán que defenderlo en directo. Han tocado en locales emblemáticos de Madrid como El Hebe en Vallekas o el Piratas de Alcorcón, con buenas críticas. Son una banda de rock, sin etiquetas, dispuesta a demostrarlo. Dales una oportunidad, se la merecen.
Jesús “Nono” García

jueves, 5 de noviembre de 2009

ZARPA “Iberia”

(Karthago Records)

Siempre es un placer volver a hablar de nuevo de nuestros queridos Zarpa. Para no perder la costumbre, nos ofrecen un montón de material a precio de risa. Nada menos que 16 canciones contiene este nuevo trabajo, más un DVD de regalo. Cada vez que publicamos una crítica sobre ellos decimos lo mismo. Aun a riesgo de repetirnos, afirmamos una vez más que, como siempre, la cantidad no afecta ni un ápice a la calidad. No hay forma de encontrar un tema de relleno. Todo lo contrario, si estuviésemos en los 80 y todavía se sacaran singles, la compañía tendría que elegirlo por sorteo, porque casi todos los cortes pueden valer. ¿Cuál escoger? ¿El himno de fidelidad a nuestro rollo “Mi Gente del Rock”? ¿Quizá “Los Ojos del Mundo”, el bonito y cañero canto ecologista? ¿La épica “Iberia”? ¿Tal vez el gran homenaje a los periodistas de guerra “Reporteros del Miedo”? Algo siempre destacable de Feijoo es su variedad letrística. Lo mismo trata asuntos personales (“Cuatro Almas”, “Rosas y Espinas”), que mitológicos (“Dios del Trueno”), que de denuncia (“Legiones del Averno”). Cualquier cosa le sirve a Vicente para inspirarle canciones geniales. La recta final del disco son tres auto versiones en inglés, “Four Souls”, “Iberia” y “Roses With Thorns”. Lo bueno del asunto es que las letras son casi idénticas a sus contrapartidas en castellano, y quedan igual de bien. Normalmente para que encajen bien en otro idioma hay que modificarlas, pero no sabemos cómo, no les ha hecho falta. No podemos dejar de mencionar el DVD de regalo. Porque no pasa de ser eso, un regalo. Un vídeo como es debido de Zarpa aún queda pendiente. Y no es que esté mal. Tanto el sonido como la imagen son de calidad excelente. Pero no pasa de ser hora y cuarto, se nota perfectamente que faltan fragmentos del concierto en que se grabó, y se echan mucho de menos grandes canciones del grupo como “La Zarpa y El Sable” o “Luchadores de la Paz”, por dar dos ejemplos. Resulta muy emotivo cuando, para celebrar los 30 años, invitan al escenario a todos los antiguos músicos. Sin embargo, ¿no había otro momento que en medio de “Herederos de un Imperio”. Interrumpir su canción más legendaria no es buena idea. No obstante, los elementos positivos ganan por goleada. Aunque en la web del grupo dice dónde conseguir el CD en Valencia, en el resto del país es tan complicado como siempre, así que recomendamos a quien le interese que lo pida por 12€ al mail andreshorrillo@hotmail.com. Dijimos en la reseña de su anterior trabajo que les iba a ser muy difícil estar a su propia altura. Estamos muy contentos de habernos equivocado. Muy bien, Zarpa. Seguid así.
Nacho Jordán

lunes, 2 de noviembre de 2009

MARILLION “Less Is More”

(Ear Music / Edel)

Decir a estas alturas que Marillion es una de las formaciones más creativas, innovadoras, brillantes e influyentes de todas las que ha dado el rock sinfónico, es poco menos que una obviedad. Pero conviene recordarlo de vez en cuando, más aun cuando como ahora vuelven a sorprendernos con un nuevo ejercicio de clase y originalidad en clave pseudo acústica bajo el ilustrativo título de “Less Is More”. Un disco relajado, intimista por momentos, con un sonido tremendamente claro y matizado en todos los aspectos, y en el que sobresale con personalidad propia la voz de un gran Steve Hogarth llena de intensidad y versatilidad. Por supuesto el poker de músicos fundadores del grupo no se quedan atrás, yendo a lo básico sin perderse en demasiados giros ni arreglos son capaces de crear unas atmósferas llenas de feelin' y elegancia aunque, lógicamente, carentes de los ritmos y pasajes más intrincados que les han hecho grandes. Esto último queda más que patente desde el inicio con la intimista y suave “Go!” que va tomando cuerpo según van entrando la percusión de Ian Mosley y las teclas de Mark Kelly, para acompañar las nítidas guitarras acústicas de Steve Rothery y al casi inapreciable bajo de Pete Trewavas. Sigue la misma línea con la más extensa y experimental “Interior Lulu” llegando a un punto desgarrado en la voz de Hogarth que contrasta con el sinfonismo de las teclas de Kelly, apoderándose a continuación la melancolía de “Out Of This World” donde se suavizan las líneas vocales y se marca más la labor de Trewavas en el bajo. Con “Wrapped Up In Time” demuestran como se puede dotar de intensidad y profundidad a una composición sin apenas ritmo en la que a base de piano y voz prácticamente crean un clima sinfónico rematado por un buen solo eléctrico de Rothery, cogiendo más ritmo jazzie y progresivo en la ambiental “The Space”. Un punto más romántico tiene la suave y plenamente acústica “Hard As Love”, para experimentar algo más a continuación en la curiosa “Quartz” con buenos cambios lentos y de nuevo con un interesante solo de guitarra eléctrica. Se anima el ritmo con “If My Heart Were A Ball”, con la base más marcada dando un toquecillo psicodélico a su sonido, volviendo a tesituras más relajadas con la más triste y pesada “It’s Not Your Fault” en la que reiteran su estribillo hasta la saciedad, con la evocadora “Memory Of Water” de cierta ambientación medieval, cerrando prácticamente el disco con “This Is The 21st Century” llena de clase y matices vocales con unos mínimos arreglos de piano que van tomando protagonismo en el tema. El cierre definitivo viene en forma de sorpresa con un tema oculto sin título en el que se desmelenan un tanto con un ritmo algo rockabilly, incluso me parece apreciar que con sonido de contrabajo, marcándose un corte vacilón que pone el broche en clave más fiestera y animada de lo que nos ofrecen en el resto del disco. Una docena de composiciones para disfrutar relajadamente, bien elaboradas y ejecutadas, pero ojo, sin el ritmo y virtuosismo superlativo que nos tienen acostumbrados estos cinco genios británicos. Si quieres disfrutarlos en directo con este formato acústico, atento porque prontos los tendremos por España mostrándonos su arte, el 13 de noviembre en Madrid y el 14 en Barcelona.
Mariano Palomo